
Pablo Riccheri, el padre de nuestros Mauser 1891
Nació en San Lorenzo, provincia de Santa Fe, el 8 de agosto de 1859. Estudió las primeras letras en la escuela que funcionaba en el famoso convento de su pueblo natal. Con motivo del estallido de la revolución del 24 de setiembre de 1874 se incorporó al Regimiento de Caballería.

Redactó su solicitud de ingreso al Colegio Militar y vino a Buenos Aires para gestionar personalmente su admisión de cadete. Su paso por las aulas fue singularmente distinguido; el 26 de diciembre de 1876 ascendió a cabo 2º, el 15 de noviembre de 1877 lo fue a cabo 1º y el 1º de setiembre de 1878 obtuvo las jinetas de sargento 2º. En las notas anuales del Jefe del Cuerpo, mayor Francisco Smith, en 1878 y 79, se leen conceptos como los que siguen: “Conducta inmejorable” – “De muchas esperanzas para la carrera militar” – “Sentimientos muy dignos de un soldado” – “Inteligencia despejada” – “Vida privada brillante” – “Carácter muy bueno aunque un poco ligero, tiene mucho amor a la carrera militar, como muy patrióticos sentimientos”. Con tal brillantes conceptos y con clasificaciones sobresalientes, egresó del Colegio Militar el 24 de noviembre de 1879 con la jerarquía de teniente 2º de artillería, siendo destinado al día siguiente al Regimiento 1º del arma, destacado en esta Capital.
Asistió a la batalla de Los Corrales, el 21 de junio de 1880, y por los méritos que contrajo en aquella campaña, fue promovido a teniente 1º el 9 de julio de dicho año. Su breve actuación en las filas del ejército le hizo ver de inmediato la necesidad que existía de perfeccionar los métodos de preparación del personal superior y subalterno, modernizando sus conocimientos y el material en uso. Al efecto, el 20 de enero de 1881 se dirigió a la Superioridad solicitando perfeccionar sus estudios en Europa, y el 29 del mismo mes, el Inspector y Comandante General de Armas, general Joaquín Viejobueno, elevaba aquella solicitud en los términos siguientes: aconsejaba fuese concedida la autorización pedida “En mérito de la conducta ejemplar y contracción que observa el recurrente”. El 22 de febrero le fue despachada favorablemente la solicitud formulada.
El 29 de setiembre de 1890 fue nombrado Director de la Comisión de Armamentos en Europa, y en el ejercicio de este cargo el comandante Riccheri prestó eminentes servicios al país, emprendiendo la adquisición del armamento que permitiese renovar por completo el muy anticuado que utilizaba nuestro Ejército. Adquirió 40.000 unidades del fusil Máuser modelo argentino de 1891, con innovaciones ventajosas ideadas por el propio Riccheri y miembros de la Comisión sobre el material en uso en el Viejo Continente. Se emprendió la adquisición del material de artillería indispensable para reemplazar el que se hallaba en servicio.
En la entrevista final con los alemanes, terminada ya la operación de compra, un representante de la empresa vendedora le da un sobre con la “comisión de costumbre” por la compra realizada.
Riccheri abrió el sobre y encontró un cheque por un considerable monto.
Sin decir una palabra endoso el cheque y se lo devolvió al funcionario que se lo había dado diciéndole; “muchas gracias por la atención, mande a la argentina el importe de este cheque en armas, o sea 3000 fusiles mas”.
Valores hoy difícilmente vistos.
Autor: Gonzalo Fernández Alonso